Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible

La Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible establece un plan de acción universal para que todos los países trabajen de forma conjunta con la finalidad de poner fin a la pobreza, proteger el planeta y reducir las desigualdades a través del desarrollo sostenible. Además, exige no dejar a nadie atrás y el compromiso global de garantizar que se cumplan los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) para todas las personas, con un enfoque específico en aquellos grupos que se encuentran en una situación de mayor vulnerabilidad.

Se entiende por desarrollo sostenible como la “satisfacción de las necesidades de las generaciones presentes sin comprometer la capacidad de las generaciones futuras para satisfacer sus propias necesidades”.

Los ODS sustituyen a los anteriores Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM) que formaban parte de la Agenda de Desarrollo Internacional, que se llevó a cabo entre los años 2000 y 2015. Una vez finalizado este proyecto se vio la necesidad de establecer un plan de acción, basado en un nuevo modelo de desarrollo, más ambicioso e integral, dirigido a mejorar la vida de todas las personas, en cualquier lugar del mundo, con un enfoque basado en los derechos humanos.

Los ODS representan una amplia gama de intereses y perspectivas porque a diferencia de los ODM, que fueron elaborados por un grupo de expertos a puerta cerrada, los ODS son el resultado de un proceso de negociación que involucró a los 193 Estados Miembros de la ONU, a la sociedad civil y otras partes interesadas.

La gestación de los ODS comenzó en el año 2012 en el ámbito de Naciones Unidas, en la Conferencia sobre el Desarrollo Sostenible celebrada en Río de Janeiro, cuyo propósito era “crear un conjunto de objetivos mundiales relacionados con los desafíos ambientales, políticos y económicos a los que se enfrenta nuestro mundo”. Finalmente, en la Cumbre Mundial sobre el Desarrollo Sostenible 2015, los líderes mundiales aprobaron lo que se conoce actualmente como la Agenda 2030 con el propósito de que en el año 2030 todas las personas vivan con dignidad a lo largo de todas las etapas de la vida, sin exclusión, violencia y discriminación, en un medioambiente sano.

Tanto la Agenda 2030 como los ODS son un compromiso voluntario que han adquirido los Estados y no tienen carácter vinculante. Además, cada Estado se enfrenta a un contexto nacional distinto con retos específicos y mantienen la soberanía plena sobre su territorio, sus recursos y su actividad económica, por lo que cada gobierno fijará sus propios objetivos y metas prioritarias.

Objetivos de Desarrollo Sostenible: no dejar a nadie atrás

Los ODS son los ámbitos de intervención necesarios que se han definido para alcanzar un desarrollo sostenible y que afectan al bienestar de todo el planeta y sus habitantes porque abordan las causas fundamentales de la pobreza y de la vulneración de derechos humanos.

En la Agenda 2030 se describen 17 ODS generales que se encuentran vinculados a 169 metas de desarrollo, que establecen qué objetivos específicos deben alcanzarse en cada ODS para lograr el ODS general, y una serie de indicadores, a través de los cuales se miden los avances que se van realizando.

Proponen cambios positivos para todas las personas y el planeta a través de tres dimensiones: el crecimiento económico, la inclusión social y la protección del medioambiente. Además, la Agenda 2030 establece un concepto de desarrollo sostenible aún más profundo al añadir otros dos factores esenciales, la participación colectiva y la paz.

En base a estos 5 elementos, un proyecto basado en el desarrollo sostenible no solo debe tener en cuenta las repercusiones sociales, económicas y medioambientales a que da lugar, los responsables de la formulación de políticas también deben asegurarse de que toda intervención se desarrolle, se gestione y se lleve a cabo con las alianzas pertinentes y movilizando los recursos adecuados para su ejecución.

Las principales áreas de trabajo de la Agenda 2030 son las que se conocen como las 5P y se encuentran distribuidas a lo largo de todos los 17 ODS: personas, planeta, prosperidad, paz y alianzas (Planet, People, Prosperity, Peace y Partnership):

• son universales porque compromete a todos los países, independientemente de sus niveles de renta o su situación de desarrollo, a que contribuyan a un esfuerzo global a favor del desarrollo sostenible y la protección del medioambiente. La Agenda se aplica con carácter permanente y en todos los países y contextos.

• están interconectados y son indivisibles porque es crucial que todas las entidades responsables de la consecución de los ODS los aborden en su totalidad, en lugar de enfocarlos como una lista de objetivos individuales entre los que se puede elegir.

• son inclusivos y participativos porque proponen centrar los esfuerzos en que “nadie se quede atrás” y deben estar implicados como agentes de desarrollo tanto los poderes públicos como las organizaciones de la sociedad civil, el sector privado, las organizaciones internacionales y la ciudadanía, a través de la creación de alianzas.

• no son jurídicamente obligatorios, pero se espera que todos los países establezcan marcos nacionales para su implementación. La medición y presentación de informes sobre el progreso hacia los ODS es voluntaria a través de revisiones nacionales presentadas en un Foro Político de Alto Nivel convocado por la ONU anualmente.

La Agenda 2030 (párrafo 23 de la Resolución en la que Naciones Unidas aprueba la Agenda 2020) identifica explícitamente a las personas mayores como uno los grupos susceptibles de experimentar situaciones de vulnerabilidad:

“Es necesario empoderar a las personas vulnerables. Por ello, esta Agenda refleja las necesidades de todos los niños, los jóvenes, las personas con discapacidad (más del 80% de las cuales viven en la pobreza), las personas que viven con el VIH/SIDA, las personas de edad, los pueblos indígenas, los refugiados y los desplazados internos y los migrantes, entre otros. Estamos resueltos a emprender más acciones y medidas eficaces, de conformidad con el derecho internacional, para eliminar obstáculos y restricciones, fortalecer el apoyo a las personas que viven en zonas afectadas por emergencias humanitarias complejas y en zonas afectadas por el terrorismo y atender sus necesidades especiales”.

Es necesario subrayar la necesidad de que los ODS han de tener en cuenta los siguientes retos, entre otros muchos:

• La necesidad de adaptarse al cambio demográfico;
• Reconocer a las personas mayores como agentes de cambio en la implementación de los ODS;

la importancia de datos desglosados por edad, para la inclusión y la rendición de cuentas.

Las personas mayores en la Agenda 2030

En los ODS tan solo se encuentran tres referencias explícitas a las personas mayores, aunque se utiliza un lenguaje inclusivo en muchos de ellos al hablar de “todos”, personas de “todas las edades” o “todas las mujeres y niñas”. Las menciones explícitas con la expresión “personas mayores” en los ODS son las siguientes:

• ODS2 – Meta 2.2 sobre hambre y nutrición
• ODS11 – Metas 11.2 y 11.7 sobre ciudades sostenibles
• ODS17 – Meta 17.18 sobre recopilación de datos desglosados por edad

Estas referencias explícitas abarcan varias áreas de políticas y prácticas que son relevantes para las personas mayores, pero no coinciden con sus principales preocupaciones como ha podido comprobarse a lo largo del curso y que serían las siguientes:

• seguridad de ingresos
• salud y calidad de vida
• discriminación y abusos
• participación
• gestión de riesgo de desastres
• sistemas de datos que incluyen a las personas mayores

La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha diseñado otro plan de acción orientado hacia el envejecimiento saludable para completar, de alguna manera, la Agenda 2030 y los ODS al incluir la perspectiva de edad y tener en cuenta la revolución demográfica que se está produciendo a nivel global. La Década de Envejecimiento Saludable 2020-2030 de la OMS se estudiará en detalle posteriormente.

ODS y personas mayores: análisis y recomendaciones

Ya se ha mencionado a lo largo del tema que la implementación de los ODS requiere de un enfoque integral a la hora de diseñar políticas y programas relacionados con la Agenda 2030 para garantizar que se logran alcanzar todos ellos, ya que están interconectados y son indivisibles. Además, también se ha analizado la necesidad y la importancia de tener en cuanta una perspectiva de edad para conseguir un desarrollo sostenible e inclusivo, sin dejan a nadie atrás.

En este apartado se estudiarán los ODS que están más relacionados con las necesidades y preocupaciones de las personas mayores y se propondrán recomendaciones específicas para su inclusión y para promover su dignidad, su bienestar y su participación. Lógicamente, esto no implica que los otros objetivos no sean igual de relevantes y que sea necesario estudiar el contexto nacional en el que nos encontremos para identificar qué aspectos tienen mayor importancia o son más urgentes y prioritarios.